<div style="font-family: 'Times New Roman'; font-size: medium;"><span style="font-family: Arial, Verdana; font-size: small;">La alcaldesa de Tomé, Ivonne Rivas, destacó que “esta iniciativa fue todo un éxito. Logramos que mucha gente llegara a nuestra comuna y también, pudimos realizar tres grandes iniciativas como esta en menos de 20 días”. </span></div>
Más de 10 mil fueron las personas que llegaron este domingo a la localidad de Rafael, en la comuna de Tomé, a disfrutar de la Primera Fiesta Costumbrista del Chancho, iniciativa organizada por la Ilustre Municipalidad de Tomé y los vecinos del sector. La alcaldesa Ivonne Rivas explicó que con esta actividad “buscamos promover nuestro sector rural y también, potenciar el emprendimiento para apoyar las economías locales”.
Desde temprano, los comensales pudieron disfrutar de lo mejor de la gastronomía típica y desayunos campesinos. La protagonista de esta fiesta fue la carne de cerdo, que se ofreció a los asistentes preparada de distintas formas. También hubo espacio para los artesanos de la zona y por cierto, para los emprendedores del sector agropecuario, muy fuerte en la localidad de Rafael.
El show estuvo animado por el conjunto folclórico Lingueral, por Los Diamantes del Sur y como plato fuerte, Los Ex Charros de Lumaco, una de las agrupaciones más prominentes en el género ranchero.
Ivonne Rivas reflexionó también que “estamos muy conformes con los resultados. A nuestros vecinos les fue muy bien y la gente de distintos puntos del Bío Bío, incluso, de otras regiones, eligió Tomé como su destino. Esto nos reafirma que nuestra comuna tiene todo para convertirse en la capital regional del turismo”.
La jefa comunal agregó que “hicimos un gran esfuerzo. En menos de 20 días realizamos la Fiesta del Camarón en Rinco, la Primera Fiesta del Pescado Frito en Cocholgüe y este domingo, la Fiesta Costumbrista del Chancho en Rafael”.
La alcaldesa adelantó que “seguiremos con distintas iniciativas en lo que queda del año y ya nos preparamos para el próximo verano. La idea que tenemos es romper con la estacionalidad y demostrar que Tomé puede ser un buen destino todo el año”.